La circulación, clave para las piernas cansadas

Damaris ReynosoEl síndrome de piernas cansadas es una enfermedad que afecta a entre un 20 y un 30 por ciento de la población adulta y es cinco veces más frecuente en las mujeres. Los principales síntomas de este problema de salud, además de la hinchazón y pesadez en las piernas, son el dolor y el prurito, el cansancio, los calambres musculares, las parestesias nocturnas (sensación de adormecimiento en las piernas), el hormigueo, picor y agujetas y, por último, la aparición de varices.
Concretamente, se trata de una enfermedad vascular que se manifiesta con hinchazón y pesadez en las piernas como consecuencia de la filtración de líquidos en los tejidos, provocado por la dilatación de las venas producida, a su vez, por el estancamiento de la sangre que circulr por ellas y, por eso, cuando se prolonga en el tiempo pueden aparecer varices.
Por lo tanto, el fenómeno de las piernas cansadas, está fuertemente vinculado con problemas de circulación sanguínea, que producen inflamación volviendo a las piernas pesadas, y manifestándose esto a través de calambres, varices, entre otros.

La mala circulación de las piernas
La mala circulación de las piernas es causada por la incapacidad de las venas de las extremidades inferiores para realizar eficientemente el retorno venoso hasta el corazón. Es una patología muy frecuente y no solo entre personas mayores, afecta al 67% de los pacientes que son atendidos en Atención Primaria.
El principal problema que conlleva a una mal circulación en las piernas es el endurecimiento y obstrucción de los vasos sanguíneos por la acumulación de placas de grasas y minerales. Es lo que se conoce como aterosclerosis, que es responsable no solamente de la mala circulación en las piernas sino de una mala circulación en general.
El exceso de peso, el sedentarismo y la mala alimentación favorecen este problema. Las paredes de las venas tienen unas válvulas diminutas que se abren y se cierran, y que, controlando la presión y el flujo de la sangre y ayudadas por los músculos, impulsan la sangre hasta el corazón. Sin embargo, si las venas pierden elasticidad y se deforman, estas válvulas no cierran bien, y la sangre, atraída por la fuerza de la gravedad, se acumula en las piernas. Como consecuencia de ello aparece la sensación de pesadez e hinchazón, los calambres musculares, el hormigueo y el dolor al caminar.La circulación, clave para las piernas cansadas

La sensación de hinchazón
Uno de los elementos más notables y que genera mayor malestar, es la tendencia de las piernas a hincharse. La inflamación se produce debido a la concentración de sangre y la acumulación de exudado inflamatorio que imposibilita la libre circulación.
La palabra inflamación deriva del latín inflammare, que significa encender fuego.
Según el diccionario de ciencias médicas, es un estado morboso complejo con fenómenos generales, diversamente definido, que en sustancia se reduce a la reacción del organismo contra un agente irritante o infectivo y se caracteriza esencialmente desde los tiempos de Celso por cuatro síntomas cardinales: rubor, tumor, calor y dolor, a los que Galeno añadió la functio laesa (el trastorno funcional).
La inflamación puede producir enrojecimiento, dolor, rigidez o pérdida de la movilidad, calor e hinchazón.
Cuando un tejido es dañado, sus células liberan histamina que produce la dilatación de los vasos sanguíneos y, por consiguiente, el aporte de grandes cantidades de sangre hacia el área afectada.
Además, los tejidos inflamados liberan líquido intracelular conocido como exudado inflamatorio, que puede acumularse infiltrando los tejidos y dificultando o imposibilitando el funcionamiento del órgano o de la región afectada
Existen diversos agentes que pueden producir inflamación; agentes vivos como las bacterias y los virus, agentes físicos, como las radiaciones, el frío y el calor, agentes químicos como las toxinas, agentes tumorales o alteraciones vasculares que producen isquemia.
Prevención y tratamiento de piernas cansadas
Para prevenir este fenómeno y tratarlo, existen distintas opciones que van desde aplicar masajes, duchas frías, posiciones que favorezcan la circulación, hasta dietas y tratamientos cosméticos que aporten los componentes químicos necesarios para solucionar este problema.
Desde la cosmética, se han desarrollado múltiples productos para tratar las piernas cansadas, tonificando y aliviando el dolor a partir de los activos que contienen. Estos productos presentan tanto componentes que favorecen la circulación sanguínea y disminuyen la hinchazón, así como otros que refrescan y relajan la piel.
La aplicación de estos productos, combinada con otros cuidados, da como resultado una mejoría en la circulación sanguínea que le quita pesadez a las piernas, combate la retención de líquidos y hace que el día a día se vuelva más ligero y placentero.

Por Damaris Reynoso

Por consultas o para sugerir temas: damarisreynoso15@gmail.com

Ingeniera química, se especializa en la producción de materias primas básicas para cremas, lociones y otro productos de belleza.

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