El verano es sinónimo de vacaciones, encuentros y celebraciones. Pero para perros y gatos, esta época puede convertirse en una etapa de alto estrés. Los cambios en la rutina, ruidos fuertes, los viajes y las ausencias prolongadas impactan de lleno en su bienestar.

Cada vez más vecinos toman conciencia de que el estrés animal no es un tema menor. Estudios recientes muestran que muchos perros y gatos sufren de miedo o ansiedad durante los fuegos artificiales, y que esos efectos pueden extenderse incluso varios días después. La hipersensibilidad al ruido, la inquietud constante y los cambios de conducta son algunas de las señales más frecuentes.
Cambios que alteran su equilibrio
Las fiestas y las vacaciones traen consigo situaciones que modifican la rutina habitual de las mascotas: más visitas en casa, traslados, viajes en auto, ruidos intensos y, en algunos casos, menos tiempo con sus dueños. Todo esto puede generar ansiedad, especialmente en animales sensibles o poco acostumbrados a los cambios.
Por eso, los especialistas recomiendan crear entornos más previsibles y tranquilos. Una de las herramientas más utilizadas en estos casos son las feromonas, sustancias que los animales producen de forma natural y que transmiten señales de calma y seguridad.
Feromonas: una ayuda para atravesar momentos de estrés
Hoy existen productos que replican estas señales naturales y ayudan a que perros y gatos se sientan más contenidos frente a situaciones que los alteran. Se presentan en formatos como difusores o sprays y se utilizan para acompañar momentos puntuales, como fuegos artificiales, viajes, mudanzas o períodos de soledad prolongada.
Lucía Marcerou, Coordinadora de Trade Marketing del Laboratorio König, explica que estas feromonas actúan sobre el sistema emocional del animal, favoreciendo una conducta más relajada, sin generar sedación ni efectos secundarios. En muchos casos, los cambios se reflejan con mayor tranquilidad, mayor descanso y una reducción de conductas asociadas al estrés.

Desde König recomiendan algunos usos simples, pensados para estas situaciones frecuentes de esta época del año:
Fuegos artificiales: colocar el difusor al menos cinco días antes y reforzar con spray en la cama o espacio de descanso unas horas antes del evento.
Mudanzas o vacaciones: enchufar el difusor desde el primer día en la nueva casa o lugar de descanso, idealmente antes de que llegue la mascota.
Viajes en auto: rociar el interior del vehículo y la cucha o manta unos minutos antes de salir, sin aplicar el producto directamente sobre el animal.
Ansiedad por separación: mantener el difusor en el ambiente donde la mascota pasa más tiempo sola.
Pequeños gestos que marcan la diferencia
Además del uso de estas herramientas, los especialistas insisten en la importancia de sostener rutinas, ofrecer espacios seguros dentro del hogar, mantener el ejercicio y el juego diario, y evitar exponer a las mascotas a situaciones que puedan sobrepasarlas.
El bienestar animal no se construye con una sola acción, sino a partir de un enfoque integral. Anticiparse a los momentos más intensos del verano, estar atentos a las señales de estrés y acompañar con paciencia y cuidado puede marcar una diferencia real en la calidad de vida de perros y gatos durante esta época.




