Tal como comentamos, el martes a la noche se produjo una situación extraña con dos encapuchados dentro de uno de los jardines de los departamentos del barrio Sendero. Frente a esta situación, desde la administración del mismo emitieron un comunicado donde se confirma que «se sufrió una intrusión por parte de dos menores en una vivienda del complejo, que felizmente no prosperó por la decidida reacción de los ocupantes de la vivienda y la posterior intervención del dispositivo de seguridad vigente». Hasta donde había trascendido, ambas personas había logrado escapar, con lo cual se desprende la pregunta obvia: ¿cómo se sabe que son menores de edad quienes lograron ingresar al barrio rompiendo el cerco perimetral?
En el mismo comunicado, se informa que las medidas adoptadas de modo inmediato incluyeron una «reunión con autoridades de Asociación Vecinal Nordelta, Administración del Complejo y Empresa de Vigiladores para concretar medidas de acción conjunta y refuerzos necesarios». Dentro de esos refuerzos se incluyen, entre otros ítems, la limpieza de obstáculos en zonas perimetrales, mejorar la iluminación en zonas específicamente sensibles por su ubicación, mejorar la capacitación de los vigiladores, mejorar el control de ingr
eso, la aplicación de GPS para la ubicación de los guardias y su monitoreo por AVN.
Pero es no es todo, también se asegura que se pondrán en práctica ciertas acciones que estaban siendo analizadas a futuro, en este caso de la mano de la empresa Sialar a partir del primer trimestre de 2017. El cambio incluirá monitoreo digital de intrusión, de incendio y de parámetros de temperatura en el bunker, anti asalto y coacción en las guardias y en el bunker, visualización general de cámaras de video en todo el perímetro del complejo, enlace remoto vía internet de los sistema de video, alarma, anti asalto, auditoría y control de accesos, entre otras incorporaciones.
